Hace tres años que nuestra propuesta de organizarnos como red de profesionales independientes en los campos de la comunicación y la cultura cuajó en NóComún. Si tres años son mucho o poco tiempo dependerá de la perspectiva con la que se mire, pero desde luego es una ocasión perfecta para tres cosas: para reflexionar, para festejar y para renovarse. Y de esas tres cosas os queremos hablar esta semana, comenzando en este post por la primera, la reflexión.
Ya sea por convicción, estrategia o instinto de supervivencia, cada vez somos más los profesionales de ámbitos como la cultura, las TIC, la comunicación y la creatividad en general que nos lanzamos a ser patrones de nosotros mismos: profesionales independientes o freelance, sin lazos por arriba (jefes) ni por abajo (empleados). Fuera de la sombra de una estructura empresarial puede que el sol caliente más, pero a veces también quema: si por una parte ganas autonomía, versatilidad y capacidad de decisión, por la otra asoman la precariedad, la inestabilidad y la tendencia a la autoexplotación.
Para mitigar los aspectos negativos del freelancismo y no sentirse solos en un océano inzado de tiburones, los profesionales independientes necesitamos cooperar con otros y establecer alianzas. Redes estables, colaboraciones puntuales, espacios conjuntos de trabajo, sociedades flexibles… Hay muchos modelos pensados para dar soluciones a todo tipo de necesidades. No buscamos la fórmula mágica del éxito, sino las claves para escoger lo que mejor se adapta a las circunstancias de cada quien.
Para abordar que modelos son más adecuados, desarrollaremos este viernes la jornada «Organizarse en red. Experiencias de trabajo colaborativo entre profesionales independientes». La hacemos en colaboración con Doutroxeito Coworking, en su espacio en Santiago de Compostela. Tres años después de arrancar con nuestra propuesta de red de trabajo, consideramos que es un buen momento para reflexionar sobre cómo cambió el panorama y que hay de bueno y de malo en nuestra fórmula y en los otros modelos de red posibles. Para alentar esta reflexión, invitamos a un encuentro horizontal en el que compartir experiencias e ideas a unos veinte profesionales de la comunicación y la cultura que trabajan o están interesados en trabajar de una manera abierta, flexible y colaborativa.
El propósito de la jornada es identificar y valorar necesidades, modelos de colaboración, tipos de relación que se establecen y beneficios y problemáticas más habituales a partir de la propia experiencia. De la jornada esperamos que nos ayude a conocer diferentes formas de organización en red y a mejorar las dinámicas de trabajo, y que en el encuentro se dé un intercambio de conocimientos, herramientas y recursos que sea provechoso para las personas que participen. Esperamos compartir a través de este blog las conclusiones de la jornada, para expandir las ideas alrededor de las redes que puedan salir de ese encuentro.
De festejar y renovarse, que buena cosa son las dos, ya os hablaremos en otro post.